jueves, 24 de julio de 2014

Mi Estadía en el Pueblo Aquel III

Para leer la primera parte: Mi estadía en el pueblo aquel - parte uno

Para leer la segunda parte: Mi estadía en el pueblo aquel - parte dos


 Al regresar me cubrí con las mantas mientras descendía silenciosamente el claro brillo de la luz de la vela sobre el estante. Traté de dormir posicionandome lo mas cómodo posible entre la almohada rasposa y las lúgubres colchas. Invadió mi intento de descanso un hedor que rápidamente se fue intensificando... Una humedad árida y mojada fue plagando el liso cristal que vislumbraba hacia fuera, a los pinos y rocas ademas de la majestuosa arboleda... Yo, totalmente agotado e impresionado, pero nada cansado, escuche la madera de la parte Sur de mi cuarto chocando contra una especie de corriente muy densa... Para ese momento suponía que Nicolaievich se encontraría descansando; Era tarde en la madrugada, pero a pesar de mi equívoco razonamiento se me ocurrió ir a investigar, ya que mi ventana estaba empañada del lado exterior por lo que no podría ver lo que yo creía era una corriente. Quito el cerrojo de la puerta, camino por un cuarto vacío en la oscuridad, para llegar hasta la puerta principal, ya que la de mi habitación estaba trancada por un árbol, pues esta abría hacia afuera. Retiro el pasador y muevo con cautela la puerta principal hacia un lado...

No hay comentarios:

Publicar un comentario